Cómo trabajar con gente complicada sin morir en el intento. Parte 2

Si trabajas con personas, tarde o temprano te vas a encontrar con alguien complicado. Es una verdad universal del mundo laboral. No importa la industria en la que te desempeñes, el tamaño de la empresa para la que trabajes, o la cultura organizacional que la defina, siempre habrá alguien que, de una manera u otra, hará tu día a día más difícil. Y si sientes que esta situación te ocurre a diario, o con una frecuencia que te preocupa, debes saber que no estás solo. Según un estudio reciente de Ryan Leak, uno de cada dos estadounidenses (46%) trata con personas complicadas todos los días en el trabajo, y un asombroso 78% lo hace al menos una vez a la semana. Estas cifras revelan la magnitud del problema y la necesidad de desarrollar estrategias efectivas para afrontarlo.

Ahora bien, cuando hablamos de personas complicadas, no nos referimos únicamente a jefes exigentes o colegas que tienen un mal día ocasionalmente. Se trata de un espectro mucho más amplio de comportamientos y actitudes que pueden hacer que el ambiente laboral se vuelva tenso, desgastante, e incluso, en casos extremos, tóxico. Puede ser un compañero de trabajo que siempre encuentra problemas en lugar de soluciones, que se deleita en señalar errores y nunca reconoce los logros; un jefe que nunca reconoce tu trabajo, que te sobrecarga de tareas sin proporcionar el apoyo necesario, o que se comunica de manera agresiva o irrespetuosa; o incluso un cliente que parece disfrutar haciéndote perder el tiempo, que te exige más allá de lo razonable, o que te trata con desdén.

El problema es que este tipo de personas y sus comportamientos no solo afectan la dinámica de la oficina, creando un ambiente de trabajo desagradable y poco productivo, sino que también tienen un impacto profundo y negativo en nuestra salud mental y emocional. El estrés acumulado por tener que lidiar constantemente con personas complicadas puede provocar ansiedad, agotamiento, irritabilidad, dificultades para concentrarse, problemas de sueño, e incluso, en casos graves, problemas de salud mental como depresión o ansiedad crónica. De hecho, según las estadísticas, dos tercios de los trabajadores (67%) han experimentado altos niveles de estrés debido a trabajar con personas complejas, y un alarmante 44% ha renunciado a sus empleos por culpa de jefes complicados. Estas cifras son un claro indicador del costo humano que tiene este problema y la importancia de abordarlo de manera proactiva.

La gran pregunta que muchos nos hacemos es: ¿qué hacemos al respecto? ¿Cómo podemos sobrevivir a estas situaciones sin perder la cordura, sin sacrificar nuestra salud mental y emocional, y sin comprometer nuestra carrera profesional? Aquí te comparto algunas estrategias clave y consejos prácticos para manejar a las personas complicadas en el trabajo, no solo para sobrevivir, sino para prosperar a pesar de ellas.

1. Entiende su Comportamiento (Sin Justificarlo): La Empatía Estratégica

Las personas complicadas suelen ser así por una variedad de razones, que a menudo son complejas y multifactoriales. Estas razones pueden incluir inseguridad personal, frustración acumulada, falta de habilidades de comunicación efectivas, o simplemente una mala actitud que han aprendido y reforzado a lo largo del tiempo. Es importante destacar que entender las posibles causas de su comportamiento no implica justificar sus acciones. No se trata de excusar su mal comportamiento, sino de comprender qué puede haber detrás de él. Cuando comprendes qué los motiva, o qué puede estar contribuyendo a su actitud, es más fácil evitar tomarte las cosas de manera personal, y puedes desarrollar estrategias más efectivas para interactuar con ellos.

Acción Práctica:

La próxima vez que alguien complicado te haga la vida imposible en el trabajo, antes de reaccionar impulsivamente, tómate un momento para reflexionar y pregúntate: ¿Por qué esta persona está actuando de esta manera? ¿Hay algo en su situación personal o profesional que lo frustra o lo hace sentirse inseguro? ¿Está proyectando sus propias inseguridades en mí? ¿Está lidiando con problemas personales que están afectando su comportamiento? Este simple ejercicio de empatía estratégica puede ayudarte a cambiar tu enfoque, a distanciarte emocionalmente de la situación, y a reducir significativamente tu nivel de estrés.

2. No Caigas en su Juego: El Arte de la Indiferencia Activa

Muchas personas complicadas prosperan en el conflicto. Se alimentan de la negatividad, disfrutan provocando reacciones emocionales en los demás, y buscan constantemente la confrontación. Si respondes a sus provocaciones con la misma energía negativa, si te enganchas en discusiones inútiles, o si te dejas arrastrar por su drama, solo estarás alimentando el problema y dándoles el poder que buscan. En lugar de caer en su juego, mantén la calma, establece límites claros y firmes, y enfócate en encontrar soluciones constructivas.

Acción Práctica:

Cuando sientas que alguien está tratando de provocarte, de arrastrarte a una discusión sin sentido, o de involucrarte en su drama, respira profundo para mantener la calma, y repite mentalmente para ti mismo: "No voy a entrar en este juego. No voy a permitir que esta persona controle mis emociones o me desvíe de mis objetivos". Luego, responde con calma, asertividad y profesionalismo, y, si es necesario, sugiere continuar la conversación en otro momento, cuando ambas partes estén más tranquilas y puedan tener una discusión productiva.

3. Establece Límites Saludables: Protege tu Energía y Bienestar

Si alguien en el trabajo siempre está drenando tu energía, consumiendo tu tiempo, o invadiendo tu espacio personal o profesional, necesitas establecer límites claros y firmes para proteger tu bienestar. Esto puede ser tan simple como reducir el tiempo de interacción con esa persona, evitar temas conflictivos o conversaciones negativas, o, en casos extremos, hablar con tu jefe o con el departamento de Recursos Humanos para buscar una solución.

Acción Práctica:

Identifica a la persona complicada que más afecta tu bienestar en el trabajo, y define un límite claro y específico para protegerte de su comportamiento. Por ejemplo, si tu jefe te llama o te envía mensajes fuera de tu horario laboral, decide no responder hasta la mañana siguiente, a menos que se trate de una verdadera emergencia. Si un colega siempre se queja y te arrastra a su negatividad, establece un tiempo límite para escucharlo antes de redirigir la conversación hacia temas más positivos o productivos.

4. Cuida tu Bienestar Mental y Emocional: Prioriza tu Salud

El estrés acumulado por tener que lidiar constantemente con personas complicadas en el trabajo puede tener un impacto devastador en tu salud mental y emocional. Puede provocar ansiedad, agotamiento, irritabilidad, dificultades para concentrarse, problemas de sueño, e incluso, en casos graves, problemas de salud mental como depresión o ansiedad crónica. Por lo tanto, es fundamental que priorices tu bienestar y adoptes estrategias efectivas para manejar el estrés y cuidar de ti mismo. Estas estrategias pueden incluir ejercicio regular, meditación o mindfulness, descanso adecuado, desconexión digital, pasar tiempo con personas que te apoyan y te hacen sentir bien, y buscar ayuda profesional si es necesario.

Acción Práctica:

Cada día, dedica al menos 10 minutos a una actividad que te ayude a liberar el estrés y a recargar energías. Puede ser una caminata al aire libre, escuchar música relajante, practicar ejercicios de respiración profunda, leer un libro, o simplemente pasar tiempo en silencio para reflexionar y relajarte. Además, asegúrate de dormir lo suficiente, de comer saludablemente, y de desconectarte de la tecnología durante al menos una hora antes de acostarte.

5. Aprende a Comunicarte Mejor: La Asertividad como Herramienta

Una de las razones principales por las que las personas complicadas generan tanto caos y conflicto en el entorno laboral es la falta de una comunicación efectiva. La comunicación ineficaz, ya sea por falta de claridad, por agresividad, o por pasividad, puede dar lugar a malentendidos, conflictos innecesarios, y un ambiente de trabajo tenso y desagradable. Cuando aprendes a expresarte con claridad, asertividad y respeto, reduces significativamente la posibilidad de malentendidos y conflictos innecesarios, y puedes mejorar tus relaciones laborales.

Acción Práctica:

En tu próxima interacción con alguien complicado, practica el modelo de comunicación asertiva. Este modelo te permite expresar tus necesidades y sentimientos de manera clara y respetuosa, sin agredir ni someterte. La fórmula básica es: "Cuando tú haces X (describes el comportamiento), yo me siento Y (expresas tu sentimiento). Me gustaría que en el futuro podamos hacer Z (sugieres una solución)". Por ejemplo, "Cuando tú interrumpes mis presentaciones, me siento frustrado y poco valorado. Me gustaría que en el futuro podamos respetar los tiempos de cada uno y escuchar atentamente a los demás".

6. Documenta Todo: Protege tus Derechos

Si estás lidiando con un jefe o compañero de trabajo tóxico, o con una situación laboral que se está volviendo insostenible, es importante documentar todos los incidentes específicos, incluyendo fechas, horas, descripciones detalladas de los eventos, y cualquier testigo presente. Esta documentación puede ser crucial si necesitas presentar una queja formal ante tu empresa, o si decides buscar asesoramiento legal para proteger tus derechos.

Acción Práctica:

Crea un registro privado y seguro donde puedas documentar todos los incidentes problemáticos que ocurran en el trabajo. Guarda correos electrónicos, mensajes, y cualquier otra evidencia relevante que pueda respaldar tus reclamos. Asegúrate de que este registro sea confidencial y de que solo tú tengas acceso a él.

7. Busca Apoyo: No Estás Solo

No tienes que enfrentar esta situación solo. Lidiar con personas complicadas en el trabajo puede ser extremadamente difícil y agotador, tanto física como emocionalmente. Por lo tanto, es importante que busques apoyo de colegas de confianza, amigos, familiares, o un terapeuta. Hablar sobre tus experiencias, expresar tus sentimientos, y recibir el apoyo de otras personas puede ayudarte a procesar tus emociones, a desarrollar estrategias efectivas para lidiar con la situación, y a sentirte menos solo y más fuerte.

Acción Práctica:

Identifica a personas de confianza en tu vida, ya sean colegas, amigos o familiares, con quienes puedas hablar abiertamente sobre tus problemas laborales. No tengas miedo de pedir ayuda y de compartir tus sentimientos. Además, considera buscar la ayuda de un profesional de la salud mental, como un terapeuta o un consejero, si sientes que el estrés está afectando gravemente tu bienestar y tu calidad de vida.

Preguntas de Reflexión:

• ¿Quién es la persona complicada con la que más luchas en el trabajo? ¿Qué tipo de comportamientos o actitudes te resultan más difíciles de manejar?

• ¿Cómo has estado manejando esa relación hasta ahora? ¿Qué estrategias has intentado? ¿Cuáles te han funcionado y cuáles no?

• ¿Qué estrategias de este artículo podrías aplicar hoy mismo para mejorar tu situación y proteger tu bienestar? ¿Qué cambios podrías implementar en tu enfoque o comportamiento?

Lecturas Recomendadas:

• "Cómo ganarse a la gente" – John C. Maxwell

• “How to work with complicated people” – Ryan Leak

• "Tratar con gente a la que no soportas" - Rick Kirschner y Rick Brinkman

La teoría es valiosa, pero la acción es donde se producen los resultados. No permitas que las personas complicadas sigan dictando la calidad de tu vida laboral. Cada día que pasas sin abordar estos desafíos es un día perdido de productividad, felicidad y crecimiento profesional. Si estás listo para tomar el control de tus relaciones laborales y experimentar un cambio real, te ofrezco un espacio seguro y confidencial para explorar tus desafíos y desarrollar estrategias personalizadas. Mi experiencia de 30 años me ha enseñado que todos tenemos el potencial de mejorar nuestras habilidades relacionales. Da el primer paso hoy mismo. Contáctame para una sesión inicial gratuita y descubre cómo podemos transformar tu experiencia laboral juntos.